Uno de los medicamentos comúnmente recetados para la acidez estomacal y el reflujo ácido son los inhibidores de la bomba de protones, (PPIs por sus siglas en inglés), los cuales son muy efectivos para bloquear la producción de ácido en su estómago.
Aunque estos pudieran ser el remedio apropiado, considerando el hecho que el ácido estomacal está subiendo hacia el esófago, en la mayoría de los casos son el peor método, ya que la mayor parte del problema está típicamente relacionado a que el estómago está produciendo muy poco ácido estomacal.
Existen más de 16,000 artículos de literatura médica que muestran que la supresión del ácido estomacal no trata el problema, solo trata los síntomas temporalmente.
Los PPIs como Nexium, Prilosec y Prevacid fueron originalmente diseñados para tratar un rango muy limitado de problemas severos. De acuerdo a Mitchell Kratz, director del Departamento de Salud Pública de San Francisco, quien escribió un editorial sobre este tema hace cuatro años, los inhibidores de la bomba de protones (PPIs) solo garantizan el tratamiento de:
• Sangrado de úlceras
• Síndrome de Zollinger-Ellison (una rara condición que hace que el estómago produzca exceso de ácido)
• Reflujo de ácido severo, que a través de una endoscopia ha confirmado que el esófago está dañado
De acuerdo con Kratz, “aproximadamente el 60 a 70 por ciento de las personas que toman estos medicamentos tienen una leve acidez estomacal y no lo deberían estar tomando.”
Parte del problema con los PPIs es que cuando se suprime la cantidad de ácido del estómago, su cuerpo reduce la habilidad para matar la bacteria helicobacter. Así que si la acidez estomacal es causada por una infección de H. pylori, realmente empeora esta condición y prolonga el problema. Además de eso, reducir el ácido en el estómago disminuye el principal mecanismo de defensa hacia infecciones transmitidas por los alimentos, lo cual incrementará el riesgo de intoxicación alimentaria. Los medicamentos de PPIs también pueden potencialmente causar serios efectos secundarios, incluyendo neumonía, perdida de hueso, fractura de cadera e infecciones con Clostridium difficile (una bacteria intestinal dañina).
Advertencia: Los Inhibidores de la Bomba de Protones Tienden a Causar Dependencia
Es importante mencionar que se puede desarrollar tolerancia y dependencia a los medicamentos de PPIs, no se debe dejar de tomar los inhibidores de la bomba de protones de golpe, sino reducir gradualmente la dosis, o de lo contrario puede experimentar un severo rebote de los síntomas. En algunos casos el problema puede terminar siendo peor que cuando empezó a tomar los medicamentos.
Idealmente, sería prudente tomar una dosis menor a la que actualmente está tomando, y luego reducir gradualmente la dosis. Una vez que llegue a la menor dosis posible del inhibidor de la bomba de protón, podrá comenzar a sustituirlo por bloqueadores de H2 sin receta como Tagament, Cimetidine, Zantac o Raniditine. Después gradualmente deje de tomar el bloqueador de H2 durante las siguientes semanas.
Mientras deja de tomar estos medicamentos (si ya los está tomando) deberá implementar un programa de modificaciones en su estilo de vida que puedan eliminar esta condición de una vez por todas. Los antibióticos normalmente pueden erradicar la bacteria H.pylori, pero también hay muchas otras estrategias efectivas que pueden funcionar. Lo ideal sería que primero probara estos métodos, ya que los antibióticos también matan las bacterias benéficas en el intestino, lo cual puede ocasionar otras complicaciones de salud. Además, la bacteria H. pylori ha incrementado su resistencia a los antibióticos, haciendo que la disponibilidad de alternativas no farmacológicas sea aún más importante.